Máscaras

¿Les ha pasado que cuando leen un libro, en algunas partes más bien pareciese que el libro los estuviera leyendo a ustedes?

Me sucedió con "El lobo estepario" de Herman Hesse, con este párrafo en particular:

"Y en tanto que yo, Harry Haller, estaba ahí en medio de la calle, sorprendido y adulado, azorado y cortés, sonriendo al hombre amable y mirando su rostro bueno y miope, a mi lado el otro Harry abría la boca también, estaba haciendo muecas y pensando qué clase de compañero tan particular, absurdo e hipócrita era yo, que aún dos minutos antes había estado furioso rechinando los dientes contra todo el maldito mundo y ahora a la primera excitación, al primer cándido saludo de un honrado hombre de bien, asentía a todo y me revolcaba como un lechón en el goce de un poquito de afecto, consideración y amabilidad"

A lo que luego reflexioné y en ese momento sentí que en este mundo estaba actuando, aceptando invitaciones a lugares y con gente que al final no quería ver, solo por cumplir una norma social. 

Y desde entonces he intentado quitarme la máscara y mostrarme tal cual soy, aceptar todos mis matices, todos mis yo, aceptar mi oscuridad y dejar aflorar mi pasión.

A veces creo que me pasa con otras personas, que quizás ellos también tienen máscaras o yo se las coloco imaginariamente, haciéndome una idea ilusa de lo que yo creo o quisiese que fueran, pero con el tiempo aprendo a quitarlas, a verlos como son. Algunos me han decepcionado o quizás me he decepcionado a mí misma.

El leer este libro me hizo sentir feliz, triste, enojada, confundida, una combinación de muchas cosas, quizás a algunos no les guste el libro y quizás yo no lo vuelva a leer, pero a veces me gusta pensar en las coincidencias y que este libro llegó cuando lo necesitaba.